El comportamiento histórico de los efectos de huracanes, tormentas, ciclones, depresiones y otros fenómenos atmosféricos en el Caribe sobre la superficie panameña parece modificarse como lo demuestran los efectos del Huracán ETA que azotó los territorios de América Central, el Caribe, México y Estados Unidos en el mes de noviembre. En el marco de anuncios de posibles efectos del Fenómeno de “ La Niña” sobre la región en el pasado mes de octubre, corresponde a las autoridades e instituciones competentes explicar si los estragos causados por ETA. Son propios de los impactos de ese tipo de fenómenos o también están vinculados a la presencia de la Niña en el océano pacífico además de otros factores intervinientes.
El paso de ETA se hizo sentir en diferentes puntos del país lo que condujo a que las autoridades nacionales declarasen el Estado de Emergencia Ambiental el 7 de noviembre en las Provincias de Bocas del Toro, Coclé, Chiriquí, Herrera, Panamá, Panamá Oeste, Veraguas y la Comarca Ngabe Buglé. Los efectos se tradujeron en lluvias torrenciales, crecidas de ríos, deslaves, inundaciones, personas desaparecidas y muertes así como importantes afectaciones a las viviendas e infraestructura en diferentes áreas.
Los efectos sobre las áreas agrícolas de las tierras altas de Volcán y Cerro Punta en Chiriquí generó preocupaciones en torno al abastecimiento de productos agrícolas para el resto del país
Pasados los efectos de ETA, se observó en el Caribe el impacto posterior del Huracán, IOTA que el lunes 16 de noviembre se elevó a una categoría 5 afectando las costas de Nicaragua y Honduras. Por los posibles efectos de este segundo huracán, las autoridades extendieron el Estado de Emergencia Ambiental a las Provincias der Colón, Darién, Los Santos y las Comarcas de Guna Yala, Madugandí, Embera Wounaan y Wargandí.
El saldo preliminar de muertes por causa de ETA se situó en 19 y el de desaparecidos quedó reducido a 12. (cifras preliminares).
Un aspecto histórico del clima en nuestro país indica que a medida que se acerca la estación seca, la estación lluviosa tiende a despedirse con condiciones climáticas inestables y de mucha lluvia en diferentes regiones por lo que la actual situación se hace algo compleja debido a la coincidencia con los fenómenos atmosféricos en el Caribe.
Una vez activadas las alertas en el país el gobierno nacional instaló un mecanismo de información sobre la situación a nivel nacional como pocas veces hemos visto en estos casos. Los efectos de Eta y Las expectativas del nuevo Huracán IOTA hacen suponer que de ahora en adelante el país pondrá más atención a los posibles efectos de estos fenómenos atmosféricos.
HURACANES, CICLONES Y TORMENTAS EN LA TEMPORADA 2020.
Tomamos de la publicación de María Toro Nader de CNN el listado de huracanes, ciclones y tormentas en la región del Caribe, México y Estados Unidos durante el año 2020 de manera que apreciemos los efectos de estos fenómenos sobre Panamá. Podemos señalar que muchos de estos fenómenos no tuvieron afectaciones sobre los países de la región debido a que una vez iniciados perdieron potencia sin convertirse en huracanes mayores de acuerdo a la Escala SAffir- Simpson.
Estos eventos tuvieron efectos en un grupo de países y puntos que incluyó: Colombia, República Dominicana, Puerto Rico, Nicaragua, Honduras, Guatemala, Cuba. Haití, Las Bermudas y varios estados de Estados Unidos como Texas, Louisiana, Carolina del Sur, Carolina del Norte, Mississippi, Florida entre otros.
Dichos eventos recibieron los siguientes nombres:
MAYO: 1.- Arthur. 2.- Bertha. 3.- Cristobal
JUNIO: 4.-DOLLY.
JULIO 5.- EDOUARD. 6.- FAY. 7.-GONZALO.8.- HANNA. 9.- ISAIAS.
AGOSTO: 10.- JOSEPHINE 11.- KYLE. 12.- LAURA. 13.- MARCO.
SEPTIEMBRE: 14.-NANA 15.- OMAR. 16.- PAULETTE, 17.- RENÉ. 18.- SALLY. 19.- TEDDY. 20.- VICKY. 21.- WILFREDO. 22.- ALPHA 23.- BETA. 24.- GAMMA.
OCTUBRE: 25.- DELTA. 26.- EPSILON. 27.- ZETA.
NOVIEMBRE: 28.-ETA.- 29.- THETA. 30.-IOTA
Como podemos observar, la gran mayoría de estos nombres no están en la memoria de los panameños por sus efectos sobre nuestro territorio como en los casos de ETA e IOTA.